Mientras espero que sean las 3 de la tarde para ver el partido de Brasil y Croacia, miro por la ventana y me pregunto a mi mismo:

— Tomás, ¿qué pasaría si finalmente le metieran chips electrónicos a las pelotas de fútbol?

Pasan unos segundos. Hago un par de clicks y vuelvo a mirar por la ventana. Le respondo a mi cerebro:

— ¿Qué clase de pregunta es esa? ¿Las pelotas pesarían más? Qué se yo, quizás el deporte pasaría a llamarse e-fútbol. — Ja, no te hagas el chistosito conmigo. Me refiero a cómo cambiarían las cosas en la cancha, los cobros. Muchos resultados serían distintos. — ¿A ver? — La pregunta la hice yo. — Bueno, no sé. Ahí ya no habría espacio para los cobros erróneos. La pelota sabría exactamente cuándo entra al arco y cuándo no. — Más bien el árbitro. — Ja. Ahora tú no te hagas el gracioso. — No, está bien. Es lógico que ahí se acaba el "entró? no entró?". — Sí, pero además, si el chip fuese bien inteligente, podría saber cuándo es impactada y por quién, por ejemplo si un jugador la tocó con la mano o no. — Pero ahí el jugador también tendría que tener un chip, ¿no? — Probablemente, a no ser de que el chip fuese bien inteligente, más adelante. En ese caso, por ejemplo, el famoso gol de Maradona con la mano jamás habría sido gol. — Y Argentina no hubiese sido campeón. — Claro. Pero hay un pequeño problema. — ¿Cuál? — Que las leyes del fútbol dicen que dentro de la cancha sólo pueden haber 22 jugadores y un árbitro. Nada más. — ¿Y? — Y eso excluye a cualquier tipo de chips. — ¿De dónde sacaste eso? — El otro día escuché a unos tipos conversando en el metro. — A ver, pero, ¿qué dice con respecto a los accesorios? — No te entiendo. — Que qué dice sobre las camisetas, sobre las zapatillas, las canilleras, o incluso esas máscaras que a veces usan los jugadores. ¿Dice algo sobre eso? — No sé, pero, ¿qué tiene que ver? — Que eso no es parte de "los 22 jugadores y el árbitro", ¿no? — Hmm... no. — No pues. O sea el chip en teoría se podría usar. ¿Contesté tu pregunta con eso? — Ehh sí. O sea, fue más como que estabas divagando. — ¿Divagando? ¿Qué es eso? — Es lo que hace alguien cuando está pensando en cualquier cosa. — Como lo que hace un árbitro cuando no sabe si cobrar gol o no. — Ja, no sé si tanto. Quizás si a tí te pusieran un chip dejarías de pensar estas tonterías y te pondrías a hacer algo! — Ya, me cansé de tí.

Y mejor me pongo a trabajar rápido, que se viene el partido de Brasil. :)